martes, 26 de diciembre de 2023

Caso Metástasis develó la incomodidad que representa el periodismo para el crimen organizado

El periodismo en los tiempos del narco (Nexos, México).

El Universo. Inquietantes conversaciones sobre asesinatos y atentados planificados contra periodistas quedaron al descubierto en los chats del narcotraficante Leandro Norero, alias el Patrón, que son parte de las investigaciones del caso Metástasis. Las comunicaciones de Norero con sus presuntos secuaces dejaron en evidencia el riesgo que corren los trabajadores de la comunicación que resultan incómodos para los intereses del crimen organizado. Varias organizaciones, como Fundamedios, la Unión Nacional de Periodistas (UNP), la Asociación Ecuatoriana de Editores de Periódicos (Aedep) y la Fundación Periodistas Sin Cadenas, se pronunciaron ante el tenebroso escenario.


***


***

Fernando López, Plan V. ¿Qué tipo de relación debe mantener un periodista con sus fuentes?, ¿cuál es el papel de una fuente humana en una investigación periodística?, ¿cuál es el objetivo del periodismo de investigación y, si se quiere, de la investigación periodística en general? Estas son algunas de las preguntas que suscita la revelación de las relaciones del periodista Anderson Boscán con Leandro Norero, capo criminal asesinado en octubre del año anterior. El periodismo de investigación debe ocuparse de problemas que, como el crimen organizado, el desastre ambiental o la corrupción, implican a poderes con una incidencia importante en la convivencia social y en el mantenimiento de las condiciones necesarias para la vida de la especie humana.

***

César Montaño Galarza, El Telégrafo. La accidentada vida de nuestro país no da tregua; casi al cerrar este azaroso año 2023, dentro del bullado caso “Metástasis”, impulsado por la valiente Fiscal General de Estado, se han encontrado chats -mensajes- demostrativos de comunicación fluida y amistosa entre un conocido periodista y un narcotraficante, lo que ha encendido el debate sobre si ese proceder es aceptable y está dentro de la ley, o no. Se supone que todo periodista conoce los linderos éticos de la profesión, respeta el código deontológico aplicable y, sobre todo, que con su labor está convocado para ayudar a comprender e interpretar la realidad circundante, sin maquillaje alguno, tal cual se presenta.

***

No hay comentarios:

Publicar un comentario