jueves, 26 de noviembre de 2015

Martin Pistorius, el hombre que no estaba ahí

Reportaje  

Pasó cuatro años en estado vegetativo. Y volvió a la vida sin que nadie se diera cuenta, víctima del síndrome de enclaustramiento. Conoció cómo se comportan las personas cuando creen estar solas. Fue testigo invisible de confidencias, miserias y grandezas. Logró recobrar su autonomía y contar su historia.

México:


El periodismo aprender a guardar silencio

Cosecha Roja-Animal Político.- Una troca blanca chocó contra un poste en la avenida. Mi compañero de trabajo me avisa. Es la segunda nota del día. Me apresuro. Llego y con mis compañeros nos acercamos a la escena, sacamos las cámaras, enfocamos.

Una camioneta de lujo, último modelo, es la dañada. Avanzamos, levantamos las cámaras:

—¡Ábranse panochones! ¡Este no es un jale que vaya a salir en los periódicos! ¡Órale, cabrones! —grita la conductora. La mujer baja de la camioneta y camina para revisar la defensa. Estatura media, tacones, cabello lacio teñido de rubio, piel blanca, nos mira con ceño duro y vuelve a gritar: