El Economista. A escala mundial, gobiernos de todo signo ideológico atacan al mensajero, no al mensaje; en México la relación de la prensa y la llamada cuarta transformación es tirante, expone el autor del libro “Prensa inmunda. Breviario de engaños, crimen y propaganda”. La propaganda es la principal herramienta que utilizan los gobiernos y entidades de poder para engañar, manipular y controlar a los ciudadanos, por ello éstos deben conocer cómo funciona, para no ser presa de ella, plantea Edgar Morín. En entrevista, el autor del libro “Prensa inmunda. Breviario de engaños, crimen y propaganda”, editado por Grijalbo, expone que el escenario más propicio para que la propaganda funcione es aquel donde hay una sociedad polarizada, una narrativa de buenos y malos, presión, espionaje y vigilancia electrónica de todo tipo de actores sociales, incluidos los periodistas. Asimismo, asegura que en todo el mundo hay una ofensiva contra el periodismo y las libertades civiles.
No hay comentarios:
Publicar un comentario