Alejandro Tovar, Código Nuevo. El periodista consagra su vida a la más
romántica de las obsesiones: la imperiosa necesidad de encontrar la verdad. Dicen
que la Medicina es la profesión más vocacional que existe. El ánimo por salvar
vidas nace de dentro y se convierte en voluntad desde la infancia. El médico
nace, igual que el policía, siempre dispuesto a mantener el orden, o el
veterinario, amante de los animales desde que comienza a andar. Pero hay otra
labor que también merece el título de aspiración vocacional. La que viene
marcada por la búsqueda de la información, por la persecución de la noticia. Y
por el deseo de contarla después. El periodista consagra su vida a la más
romántica de las obsesiones: la imperiosa necesidad de encontrar la verdad.
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